Considerar árabe, musulmán y moro como sinónimos es sólo uno de los múltiples y más comunes errores. Tanto o más grave es la imagen distorsianada de lo árabe y lo islámico que se ha producido y difundido por siglos desde Occidente.

dissabte, 7 de febrer del 2015

Temario preliminar

1. Islam o islames: unidad en la diversidad
2. "¿Fundamentos del islam?": los cinco pilares
3. Corrientes, tendencias y aproximaciones al islam
4. La historia y el mito: los califatos
5. Sharia, hisba y política en la historia premoderna
6. Los estados (islámicos) y sus sociedades: características en época premoderna
7. La teoría explicativa de Ibn Jaldún: presente, pasado y futuro
8. Decadencia e impacto colonial
9. Islam y modernidad: reforma, renovación, nahdas
10. El islam entre nosotros, nosotros entre ellos: migraciones, diásporas, conversiones, medios y terrorismo
11. Salafismo y wahabismo
12. Yihadismo
13. ¿La utopía del califato?
14. Perspectivas de futuro. ¿Guerras civiles, yihadismo y fracaso de las "primaveras"?

dimecres, 4 de febrer del 2015

Legitimidad y Yihad (como Guerra Santa)

En la misma línea que lo apuntado en la anterior entrada, una de las disputas entre ISIS (o DAESH, o Estado Islámico, supuesto califato) es acerca del concepto, capacidad de decretar, organizar y dirigir la yihad (y el califato). Si la ideología e interpretación del islam (incluyendo la definición de quien es musulmán y la concepción y puesta en práctica de la sharia) en el fondo es la misma (el wahabismo), Arabia Saudita considera (y ahí también se introduce la cuestión de cómo legitimar su Estado y la monarquía, por tanto entramos en la esfera de la teología política) que no existe nadie legitimado para proclamar ni el califato ni la yihad y, por tanto, ambos están en suspenso y al-Bagdadi no dispone de legitimidad alguna. En todo caso, al contrario de lo que entienden muchos de los islamistas que siguen el alegado califato, según los gobernantes y ulemas oficiales, Arabia Saudita y su monarquía serían gobiernos no solo islámicos sino plenamente legítimos y, en consecuencia, no pueden ser atacados bajo la cobertura de la yihad.

dimarts, 3 de febrer del 2015

Pena de muerte y legitimidad

A algunos les puede parecer una barbaridad, algo impropio de los tiempos en que vivimos, para otros quizás sea algún tipo de justicia, pero, en todo caso, la pena de muerte, cómo y por qué sería legítimo condenar a alguien a la pena capital, puede ser objeto de una inacabable discusión. El hecho de que haya existido en muchas sociedades del pasado, o que incluso la hayan puesto en práctica (o aceptado) regímenes democráticos o pensadores ilustrados no afecta al problema de fondo. Desde mi punto de vista, más que justicia, el supuesto ajusticiamiento tiene muchos elementos de venganza y/o de escarmiento y advertencia, especialmente cuando se trata de ejecuciones públicas.

La verdad es que desconozco quién tiene actualmente el dudoso honor de ser el país con mayor número de ejecuciones, probablemente sea China, aunque quizás el Estado Islámico lo haya superado en tiempos recientes (de acuerdo que es una situación de guerra, pero las acusaciones, víctimas y supuestos delitos también son diferentes, además de poner en entredicho las prácticas de la guerra y de la yihad). Arabia Saudita no se queda muy atrás del supuesto Califato, pero, dicen ellos, están legitimados para asesinar personas públicamente porque así lo dictó un juez. Vean al respecto (gracias al compañero que me envió el enlace):